martes, 17 de junio de 2008

DON'T CALL ME BY MY RIGHT NAME

NO
No es melancolía
Es otra cosa...
Es la reconfortante soledad de la palabra no leída.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me acabas de recordar una extraña historia que me contó un tipo hace tiempo. Resulta que, cuando era pequeño, su abuelo tenía una carpintería y, entre los materiales de trabajo, había una cola con, al parecer, poderosos efectos psicoactivos. No me acuerdo de los detalles exactos de la historia, pero el caso es que, no sé cómo, si por efluvios o inhalación directa, en una ocasión el tipo en cuestión acabó respirando aquel pegamento y entrando en un estado de sopor onírico realmente abrumador. En él, "era" una letra en un renglón perdido de un libro polvoriento. De repente, notó como alguien comenzaba a pasar las hojas, de manera que "sentía" que llegaría a "verle", y "sabía" que eso significaba ser absorbido y, de alguna manera, "extinguido" por su percepción. Efectivamente, llegado el inexorable momento, le alcanzaba el haz de luz de la visión y era como "arrancado" de cuajo y sin remisión de la página, en plan abducido por un OVNI.

El gran ojo perturbó la "reconfortante soledad" de la letra "no leída"...

alberto dijo...

El tipo en cuestión era/es Roberto... No recordaba los detalles de "su viaje".
En cualquier caso es una historia bien bella.